domingo, 24 de mayo de 2015

Cortos pero Intensos.

Una gran manera de aprender el lenguaje del cine y, a la vez, promocionarse. Espero que lo disfrutéis



lunes, 4 de mayo de 2015

“...Y Kenny Feliz” (Ficzone 2015)



Una nueva edición de Ficzone, pero no una más. Este año, aún sin conocer cifras oficiales de asisitencia, el evento superará todas las expectativas previstas en este sentido. Este dato viene respaldado por las dos horas y media de cola que tuve que hacer a pleno sol antes de poder entrar al Palacio de los Deportes de Granada, más la observación directa de gradas y pista que pude realizar in situ.

La primera impresión al contemplar la zona central, plena de aficionados y stands, fue realmente impactante. Por un momento me pareció estar de vuelta en San Diego. La iluminación y el bullicio invitaban a disfrutar de un bonito día cargado de tebeos, cruces y merchandising vario.


Una gran programación en la que se podía encontrar prácticamente de todo lo que nos gusta a la gente como tú y como yo, dos frikis de toda la vida sin remedio y que, en mi opinión, no defraudó a nadie.

He de confesar que, en un principio, este Salón para mí siempre fue secundario, por su declarada temática japonesa. El manga me gusta, pero hay muy pocas series que me hayan impactado de verdad. Sin embargo, poco a poco, han ido incluyendo actividades relacionadas con el comic americano, español y europeo en general o, como en esta edición, con series de temática ci-fi como “El Ministerio del Tiempo”, que logran atraer a otro tipo de público más cercano a mis gustos personales.

Y a pesar de todo, los únicos tebeos que compré en los escasos stands donde podían ser adquiridos, fueron los números 1 y 2 de un shonen de realización española titulado “Dos Espadas”.

Buenas charlas las del sábado, en las que pudimos disfrutar y aprender por igual con autores de la talla de Jorge Molina, Rafael “Fali” Ruiz, Nacho Tenorio o Jorge Jiménez. Pero la mejor, con todo respeto a los anteriormente mencionados a los que aprecio y admiro, fue la de Kenny Ruiz y Rubén Candel.

Los artistas presentaron el cuarto y último tomo de “Dos Espadas”, dando muestras de por qué son ya valores reconocidos en esto del arte secuencial. Haciendo uso de fotografías que ilustraban TODO el proceso de realización de la serie en lo técnico y en lo personal, alcanzándose momentos de gran emotividad, Kenny y Rubén nos contaron como todo surgió a partir del deseo de complacer al hermano menor del primero, Daryl, allí presente también, con un manga similar a los que tanto le hacían disfrutar en su infancia. A partir de aquí, adoptando elementos de nuestra cultura nacional, Kenny elaboró la historia que concluye con este último cuarto volumen y que, como en toda buena historia que se precie, tenía que tener giros inesperados en los que los protagonistas, y estoy hablando de sus autores, se vieron obligados a superar grandes dificultades y retos para conseguir ,tras su climax, alcanzar un final feliz.

Por mucho que yo os pueda contar, estos momentos tan emotivos deben ser vividos cuando se producen para entender la plenitud de su significado vital. El caso es que, un comic hecho con tanto cariño y esfuerzo, tenía que estar sí o sí en mis estanterías. Encima, es muy bueno, por lo que los dos últimos tomos también pienso comprarlos. “...Y Kenny feliz” (je).