domingo, 28 de septiembre de 2014

I'll be back".




Aún quedaba un cartucho por disparar en la recámara de este verano superfriki del 2014. 

Tras una mítica visita a San Diego, que próximamente espero seguir relatando, y otra imborrable experiencia con “La Hermandad” en Avilés, que también próximamente relataré, hoy, día 28 de septiembre, Arnold Schwarzenegger ha tenido a bien visitar la ciudad de Almería.




El motivo era la recogida del premio honorífico “Almería, Tierra de Cine” del Festival Internacional de Cortometrajes “Almería en Corto”. El premio le ha sido otorgado en la Diputación a eso de las 16:30 de la tarde para, una hora después, desplazarse al Paseo de las Estrellas e inaugurar la suya. Desde hoy, ya luce junto a las de Omar Sharif o Ridley Scott, por citar algunas.

Pese a haber tenido que soportar un poco de calor, he de decir que ha resultado muy emocionante esperar la llegada de este monstruo de los blockbuster. Tenerlo cerca, verlo interactuar con los vecinos de la localidad, un hombre que ha sido y es todo lo que se puede ser dentro del cine de acción y del culturismo, se ha convertido en un inesperado regalo para todos aquellos que disfrutamos de otras formas menos sesudas de entretenimiento.

Frente al teatro Cervantes, el actor nos ha dedicado unas breves palabras a los allí presentes aunque apenas he podido escucharlas, dado el ruido de una multitud enfervorizada y el escaso volumen de los micrófonos. Sin embargo, sí he podido captar dos momentos para mí especiales: el primero, en el que la estrella daba las gracias a la ciudad; y un segundo en que pronunciaba su ya famoso “I’ ll be back” prometiendo regresar a esta la que es desde hoy su casa. 





Dos frases que quizá para muchos resulten insuficientes para compensar una espera bajo el sol de Almería. Dos frases que, sin embargo, han sido capaces de llenar de emoción el corazón de éste vuestro humilde amigo friki.


viernes, 5 de septiembre de 2014

SDCC 2014: Thursday (III)



-“Cuando Bob Kane y Bill Finger crearon Batman, estaban estableciendo uno de los extremos entre los que se encontrarían todos los superhéroes después. En el extremo más opuesto a Batman está Superman; Batman no tiene superpoderes. Batman eres tú…y soy yo”.

Esta reflexión, apuntada por Neal Adams, ponía encima de la mesa una idea clásica en el debate.

-“He llegado a escribir las historias de Batman y de Superman simultáneamente,… ¡y Superman es una guarra para tener que escribir sobre él!
Batman es el tipo más listo de Gotham, pero es muy fácil meterlo en líos, aunque sepas que ninguna trampa mortal vaya a acabar con él. Ésta es la razón por la que abandoné las series de Superman y me dediqué íntegramente a las de Batman”-añadía un exaltado Denny O’Neill.

-“No olvidemos que Superman es un buen chico, que sigue las reglas que sus padres adoptivos le enseñaron. Batman a veces pierde los papeles, y cuando los pierde es terrible. Da mucho miedo. 

Los niños de hoy en día, como los de antes, parecen crecer en la dicotomía Superman-Batman. Yo, desde luego, sé de qué lado estoy”-señalaba Miller.

Entonces Snyder intervino.

-“Creo que, principalmente, mi papel en esta charla es no desmayarme al estar aquí rodeado de tanto talento”.

 Una vez más, las risas aparecieron entre los allí congregados, que lo estábamos pasando como pocas veces en nuestra vida.

“Batman ha llegado a ser un personaje tan icónico porque, balanceándose por la ciudad con su traje de murciélago, sabiendo que es tan solo un hombre, parece estar diciéndonos que, con suficiente entrenamiento y esfuerzo, podemos superar cualquier obstáculo que la vida nos plantee. Para mí ha sido siempre una fuente de inspiración, de hecho, se me ha saltado una lágrima cuando Neal ha dicho que yo era Batman...”.

-“Sí, pero también corría por ahí con un crío en mallas vestido con colores brillantes, con una enorme elipse amarilla en su uniforme que enmarcaba el murciélago en su pecho. Una de las cosas de las que más me enorgullezco es de haber podido acabar con aquella maldita diana amarilla”- como puede verse en su Dark Knight y en el resto de la obra del simpar Frank Miller.

-"La verdad es que yo solo he escrito una historia para Batman, aunque ahora esté trabajando en la serie Gotham . Pienso que es tan fácil identificarse con el personaje porque es un luchador. Con sus propias capacidades y fuerza de voluntad, es capaz de superar cada uno de los obstáculos a los que se enfrenta. 

Cuando vas por la calle y ves a alguien vistiendo una camiseta con el símbolo del murciélago, o en el metro leyendo uno de sus comics, percibes un vínculo invisible. Ese murciélago es uno de los iconos más reconocibles de este mundo"- decía Johns.

El maestro O’Neill continuaba al hilo de la reflexión.

-“Es interesante remarcar que Batman se ha convertido en un símbolo más importante que Superman o Spiderman ,debido a que hemos tenido que crecer en un mundo inseguro en el que, lunáticos de Oriente Medio, tienen sus dedos puestos sobre botones peligrosos, y en una situación política desesperanzadoramente rota. Batman refleja eso, como refleja la mayor pesadilla de todo niño: ver morir a tus padres asesinados. Si no existiera este personaje, alguien debería inventarlo porque es perfecto para el mundo en el que nos encontramos”.

Cunningham, el conductor de la charla lanzó otra cuestión:

-“Entonces, ¿cuál es vuestra versión favorita del personaje?”

Por supuesto, entre las respuestas, las historias de Miller aparecieron en primer lugar, poniéndolas a su vez en relación por contraste con las de la serie de TV de Adam West. 

La cosa fue quedando bastante clara. Jim Lee aseguraba que Dark Knight Return fue la razón que lo impulsó a ser dibujante de comics, y Miller se lo agradeció públicamente.

-“Antes de nada, gracias. Para mí todo esto también ha sido un sueño desde que leí aquel comic de 80 páginas en una tienda de Vermont cuando era niño. Al abrirlo, el dibujante Jerry Robinson me transportó de inmediato a un universo de grandes edificios con sombras infinitas e inenarrable violencia, repleto de personajes terroríficos como el Joker. En ese preciso momento, me enamoré perdidamente del personaje y, aunque con el tiempo ese amor se fue atenuando, no fue hasta la etapa de O’Neill y Adams que me di cuenta de que Batman no solo contaba con un legado, sino también con un futuro”.

-“Una de las cosas de las que me he dado cuenta cuando venía hacia aquí a esta charla sobre el 75º Aniversario de Batman es de que, en medio de todo, hay un personaje invisible. Su nombre es Bruce Wayne- Batman. El resto de nosotros nos hallamos girando en torno a él, tratando de contar sus historias. Hay un Batman que todos conocemos y que todos interpretamos a nuestra manera, pero en el centro de todo está él. Como si fuera real. 

Ninguna de nuestras versiones está equivocada al 100%, de hecho todas son correctas. Y aquí estamos, una vez más. Alrededor de él. Casi como si fuera real”.

-“Sí, Neal. Yo no creo que haya habido alguna versión equivocada de Batman, todas han sido correctas durante un tiempo. La de los 50 no es de mi gusto, pero creo que fue la adecuada para entonces. Yo era un niño y no lo entendía bien. Superman vestía una capa y podía volar, pero Batman llevaba otra y él no podía. Si lo hubiera tenido delante entonces, le habría gritado: ¿Pero por qué llevas capa? ¡Si tú no vuelas! 

Sin embargo, cuando empecé a escribir sus historias, resultó ser una experiencia muy divertida. Podías contar su origen en una frase y, a continuación, ponerlo virtualmente en cualquier situación dramática que pudieras imaginar”.

Tras la intervención de O’Neill, el conductor de la charla nos mostraba a los asistentes, un primer plano de Affleck con la máscara del murciélago en la gran pantalla a sus espaldas.

-“Podríamos resumir todo lo dicho en que Batman es un gran diamante de múltiples caras. Puedes hacer comedia, programas de tv o las historias más oscuras con él. Puedes arrojar el diamante contra la pared, el suelo, el techo y no se romperá. Es un personaje que siempre funciona”.

Tras el comentario de Miller, Johns se volvió hacia la foto y señaló: 

-“Parece realmente duro”.

-“El futuro de Batman está asegurado”- apuntaba Morrison.”Se ha convertido en un personaje de la talla del Rey Arturo, Robin Hood o Sherlock Holmes”.

-“¡Cualquiera que piense que Batman no tiene futuro o que su futuro es limitado, está declarándose chocho!”- añadía Miller.

Y con esto, llegaron los 30 minutos finales de la charla, en la que los fans podíamos poner encima de la mesa aquellas cuestiones de nuestro interés que aún no hubiesen sido comentadas. 

Rápidamente, se formó una cola frente al micrófono de pie, y comenzó la última ronda de preguntas. Morrison fue el primero en responder.

-“Ésta es una pregunta que querría hacerles a todos: ¿cuál ha sido su encarnación cinematográfica favorita del personaje?”

-“Me encantan las recientes películas de Christopher Nolan. Copian un montón de cosas de las etapas de Denny, Neal y Frank pero, como fan de Batman, me gustan todas. Hasta las más tontas de Schumacher”.

-“Yo te responderé con dos palabras: Christopher Nolan. Ha creado uno de esos personajes que, cuando lo ves, piensas:¡Dios mío, lo está haciendo mejor que yo! ¡Este tío tiene un gran respeto por el material existente y está dirigiendo magistralmente su propia nave!”.

Tras la respuesta del maestro O’Neill, un segundo fan preguntaba:

-“Lo primero de todo, es decirles que son todos alucinantes y que les amo…”

-“Y nosotros a ti”-interrumpía Adams, a lo que Miller no pudo reprimir un jocoso:

-“Yo no”.

El chico rió y formuló su pregunta.

-“Si tuvieran la oportunidad de reinventar alguno de los personajes femeninos que acompañan a Batman, ¿cuál elegirían?”. 

-“Todos”.

-“Estoy de acuerdo con Frank, todos. Son muy aburridos”.- contestaba Adams.

-“Bueno…, para mí Barbara Gordon es un gran personaje. A pesar de que su origen tuviera lugar en la serie televisiva y sea un poco ñoña, el hecho de que sea la hija del comisario Gordon y de que se vea con Batman, conectando con él a su manera y a espaldas de su padre, me parece fascinante”- disentía Johns.

El público también realizó la típica pregunta sobre la historia favorita de cada autor, pero la siguiente cuestión que llamó verdaderamente mi atención por lo inesperado de las respuestas fue ésta:

-“¿Algún recuerdo o anécdota sobre sus experiencias con Bob Kane y Bill Finger?”.

El maestro O’Neill fue el primero en contestar.

-“Bueno,…¡La verdad es que hace un tiempo espléndido en San Diego…!

He comentado algunas cosas sobre Bill en otras mesas redondas. De hecho, fue una de las primeras personas en comprender el método de trabajo en los comics. Sabía adónde se dirigía. Si miras alguno de sus historias iniciales, podrás ver que trasladó los mejores recursos del pulp a este género y los supo utilizar como el maestro que era. 

Sobre Bob Kane,…¿He dicho que hace un tiempo estupendo en San Diego?”

Miller tomó la palabra.

-“Conocí a Bob Kane aquí en San Diego. Estaba muy desconcertado por mi Dark Knight y me preguntó: ¿Por qué lleva esa mujer una esvástica en el trasero?”.

-“Mi interacción con Bob Kane se puede resumir en la siguiente frase: ¿Cuándo vas a dibujar a Batman de la manera correcta?”- relataba Adams.

O’Neill, y pienso que todos los demás también, estaban bastante molestos con Bob Kane porque, según se dio a entender, éste abuso del carácter retraído y bonachón de Finger para quedarse por completo con los derechos del personaje.
 El maestro O’Neill no disimuló en modo alguno su malestar por semejante atropello.

Y así, llegamos a la última pregunta de la tarde. 

La chica que la formuló iba vestida de Batgirl, con una máscara que parecía hubiese sido diseñada para ella ex profeso. Por su estatura, no creo que contara con más de 13 años de edad.

-“¿Qué es lo más representativo del espíritu de Batman?”.

-“Voy a intentar adivinar lo que me pides- respondió Adams. 

Creo que se trata de una amalgama de lo que hacemos todos nosotros. En los comics, aún no hemos encontrado la respuesta a la pregunta que nos haces con absoluta certeza, aunque espero que en el mundo del cine puedan encontrarla.
Y a pesar de que nadie me ha preguntado sobre Ben Affleck, me gustaría añadir que me parece una elección estupenda”.

-“Todo lo que puedo decir sobre lo que preguntas es que, sea lo que sea, la mejor manera de experimentarlo está en los comics”- dijo Miller.

-“Por lo menos no le dibujamos pezones…”- añadía Adams.

Jim Lee y Grant Morrison también dieron su opinión al respecto.

-“Creo que sé a lo que te refieres. 

Cuando miras a Bruce Wayne y a Batman, tan poderoso, todavía puedes ver al niño frágil de 10 años que daría lo que fuera por cambiar lo que le sucedió en el Callejón del Crimen. Cuando pienso en Bruce Wayne, vuelvo a eso y se me despierta el instinto protector hacia mis hijos. E incluso hacia Bruce Wayne…”.

-“Para mí Batman es todas las versiones de Batman. Una persona a veces feliz, a veces oscura, a veces divertida…Es lo que hemos encontrado en sus colecciones durante todos estos años. Como Frank decía, puedes mirarlo bajo cualquiera de estos ángulos. Por esto es por lo que resulta tan humano, por estas contradicciones aparentes que podemos encontrar en el personaje”.

-“Creo que he encontrado la respuesta a tu pregunta: Lo mejor que tiene Batman es aquello que tú crees que es lo mejor”-apostillaba Miller.

-“Ha habido cinco…puede que seis interpretaciones de Batman radicalmente distintas, y ninguna de ellas es errónea. Si te gustan, son geniales”- dijo el maestro O’Neill.

Entonces, Geoff Johns tomó la palabra para cerrar la más épica de las mesas redondas a las que he tenido la suerte de asisitir, y que sin duda quedará grabada en mi retina hasta el último día de mi vida.

-“Has preguntado por aquello que mejor representa el espíritu de Batman, y tú estás aquí vistiendo una capa y una máscara. 

El espíritu de Batman ERES TÚ”.