viernes, 15 de febrero de 2013

"Entonces...tú calcas, ¿no?"

No puedo creer que aún existan personas que ninguneen el trabajo de un entintador. Toda falta de respeto contra una persona me molesta, pero me resultan especialmente hirientes aquellas que son dirigidas hacia las que dedican sus vidas a enriquecer o mejorar  las de los demás. Hace poco, tuve el dudoso placer de conocer una de estas ignominias a través de facebook.

Un entintador crea el clima de la viñeta.
El Ayuntamiento de Algeciras y la Universidad de Cádiz organizan en breve unas jornadas donde diferentes artistas darán a conocer algunos de los entresijos profesionales más interesantes del mundo del cómic.Hasta aquí bien. El problema surge cuando se habla de la faceta entintadora de alguno de ellos en clave de "colaborador" del dibujante. No te voy a explicar a ti, amigo mío, la importancia que tiene  la labor de un buen entintador. Pero como soy consciente de que no todo el que se asoma a esta ventana es igualmente conocedor de estos pormenores, he pensado que estaría bien dejar una pequeña selección de imágenes que hablasen por sí solas sobre este particular.

 
Un entintador perfila y da volumen al dibujo.
 A continuación, vemos tres páginas   realizadas por un mismo dibujante( el inconmensurable John Buscema) y entintadas por tres artistas diferentes(Tony de Zuñiga, Alfredo Alcalá y Tom Palmer). Como puede apreciarse, el resultado final es bien distinto en cada caso.


En este otro ejemplo, diferentes estilos de tinta definen de forma radicalmente opuesta el efecto definitivo. .






Juzga por ti mismo; unas buenas tintas pueden transformar un dibujo mediocre en excelente y viceversa. De ahí que los dibujantes  pongan gran interés en la elección de sus compañeros de tablero.



miércoles, 13 de febrero de 2013

Estamos en Peligro.

Ya hemos hablado alguna vez del poder didáctico y comunicador de este medio. Aquí, el amigo David López da una muestra de lo que puede ocurrir con la que está cayendo.

martes, 12 de febrero de 2013

Otra tirita.

Siguiendo con el invierno, preparé está tira con una frase que le oí una vez a mi cuñado. Si os fijáis, el Manolín de entonces era sólo un personaje secundario que evolucionó hasta quedarse con la tira.

lunes, 11 de febrero de 2013

La Madre del Pollo.


Ésta es una vieja historia que sucedió en los días en los que aún me encontraba abriéndome camino entre proposiciones, teoremas, lemas y corolarios en la carrera. 

Era un sábado cualquiera en Granada y, como tenía por costumbre cuando no tocaba volver al pueblo, emprendía la ruta de las librerías especializadas de la capital; siempre con más deseos que posibilidades económicas reales de adquirir  las colecciones que me gustaban.

 El caso es que me acercaba a ese pequeño pero nutrido reino del noveno arte y la literatura fantástica que responde al nombre de Flash Comics,  cuando algo llamó súbitamente mi atención. Frente a su escaparate, se encontraban dos personas hablando sobre un cómic en particular de los que allí se exponían; lo cual no tendría nada de especial de no ser porque nos referimos a  dos señoras que rondaban ya  los sesenta años de edad. Y lo mejor era que dialogaban con ímpetu sobre dicho cómic, como si de verdaderas expertas en la materia se tratase. El cómic en cuestión era el segundo volumen de la serie de Blacksad, que acababa de salir por aquel entonces.

En otras circunstancias nunca hubiese llegado a enterarme de qué era lo que ocurría; dos fans del trabajo de Díaz Canales y Guarnido de su sexo y edad resultaban  realmente llamativas. Pero la casualidad hizo que  una de las dos señoras fuese conocida mía. Se trataba de la  madre de una antigua alumna, la cual compartía  afición con su hermana por las historias del gato detective y a la que también conocía al ser amiga de mi mujer, por aquellos entonces novia.

 La otra dama era, nada más y nada menos, que la señora madre de Juanjo Guarnido.Y claro, una vez conocido este dato, la explicación resulta bastante obvia. La señora comentaba orgullosa con su amiga la edición del álbum dibujado por su hijo. Las madres son así, no hay que apretarles mucho para que enseguida se pongan a hablar de las virtudes de sus "chiquillos". Pero eso sí, convendrás conmigo amigo mío que, en esta ocasión, había mucho de lo que sentirse orgulloso.


D.D.C. (Descubriendo a Darwyn Cooke)


Ya sé que muchos de vosotros lo conocéis desde hace mucho tiempo, pero para mí era casi un desconocido. Su trabajo ya me llamaba la atención antes de fijarme en quién lo firmaba (la cabecera de Batman del Futuro es suya, y me parece genial), pero en papel impreso...quizá haga tres años como mucho. Catwoman, New Frontier, Parker y, recientemente, Batman: Ego es todo lo que he leído de él. Y desde luego, no me extraña que haya alcanzado el reconocimiento del que goza hoy en día; El Gran Golpe de Selina es una p#"* obra maestra. 


 

Si te gusta esto del cómic, ya tendrás este volumen; en caso contrario, ya te está faltando tiempo para hacerte con él. Yo mismo te devuelvo el dinero si esta historia en particular no te gusta. Y, aunque incluye otras casi tan buenas, ésta se sale. Porque, claro, siendo él un dibujante de su categoría, resulta difícil valorar cuánto se debe al guión y cuánto no. Sin embargo, la historia está perfectamente estructurada, los personajes son sólidos (Stark y Parker son la misma cosa; el creador literario del segundo respondía a este nombre entre otros), giros, acción,...todo. Puedes encontrar críticas más elaboradas en otros blogs; yo solo quería compartirlo contigo.

miércoles, 6 de febrero de 2013

La Esencia de Manolín.

Como ya os comenté, el personaje de Manolín surgió como secundario en 3ª Edad que, con el tiempo acabó quedándose con  la tira semanal.

 Pretendía que fuese  algo artificial en su manera de expresarse, con un vocabulario y un habla impropio de su edad. La idea era que la cosa  funcionase por contraste.