El autor es amiguete, vaya por delante, y es de los afortunados que tienen el coraje para intentar vivir de esto del cómic, encima haciendo felices a todos aquellos que se molestan en leer lo que tiene bien a imaginar.
No voy a hablar más de Joseph Busquet porque la entrada no va de él, aunque sí de uno de sus "hijos" pero, si estás en uno de esos días en que te apetece comprar algo diferente por aquello de favorecer el mercado nacional, y echar un vistazo a lo que son capaces de hacer los autores patrios, dale una oportunidad. No creo que te arrepientas y encima tú dinero irá a parar a buenas manos, te lo aseguro (aunque la editorial se lleve su trozo del pastel; pero bueno ellos también se juegan su capital apostando por Pep)
La cosa es la siguiente: en un país imaginario, en el Bajo Medievo o así, tenemos a un rey y su séquito de consejeros que hacen lo que vienen haciendo los reyes y demás políticos, que es vivir del cuento a costa de unos impuestos que pagan los de siempre.
Pero un día, el rey sufre un estúpido accidente que acaba con su vida y el Consejo Real, aka chupadelbotequenotienenvergüenzanilahanconocido, ven amenazada su forma de vida; se les acaba el chollo. Lo que están dispuestos a hacer por evitarlo y seguir sangrando a un pueblo, crédulo que raya la ingenuidad más absoluta, con impuestos cada vez más abusivos es lo que constituye el núcleo central de la historia. Humor y crítica a la situación social a partes iguales, un más que correcto dibujo de Roc, al que espero conocer mejor entre copas de ese maldito brebaje asturiano, y un "bonus track" una vez acabado el relato (cosa que yo no había visto en el cómic y que me ha encantado como recurso) hacen de "Consejo Real" un tebeo a atesorar. Además, aquí los protagonistas son los malos, cosa que de vez en cuando está bien por aquello de romper con la rutina. Muy divertido. Cómpralo, hombre.
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