Vengo del cine. No sabía muy bien si acercarme a ver Pacific Rim, Elysium o El Llanero Solitario. De la primera me habían hablado muy bien, aunque en principio, no era una peli que me interesase mucho. De la segunda, me habían hablado muy mal, pero para mí Damon y Foster son dos actores que suelen garantizar un espectáculo de calidad...Del Llanero Solitario solo tenía a favor la aparición de Johny Depp, que a mí me parece un actor más que correcto en todos y cada uno de los papeles que ha interpretado, o que yo le he visto interpretar, y el hecho de estar basado en un personaje de cómic... Pues a por ella.
Lo que se comenta en la red es que Disney se está dando de bruces con esta producción; lo que yo puedo decir al respecto es que dudo mucho que así sea o vaya a ser.
Desde luego, el que espere una película de método, con grandes y sesudas reflexiones, con actuaciones de las que te ponen la piel de gallina..... es que no se ha enterado de que es una película de Disney. Pero si esperas algo parecido a la saga Piratas del Caribe, entonces tiene usted un pleno, caballero.
Johny Depp es Johny Depp, y el que espere que no repita algún gesto o matiz interpretativo se equivoca de planeta. Pero claro, muchos son sus críticos en este sentido con el actor, olvidando que otros tan reconocidos como De Niro o Nicholson también las tienen. En este caso no se dice que interpretan el mismo papel, se les llama marcas de estilo.
No quiero ponerme demasiado reflexivo porque la película en modo alguno lo requiere, aunque se pueden hacer segundas lecturas para mí bastante interesantes sobre el dinero y la moral. Pero como ya digo, me parece totalmente fuera de lugar, porque no es lo que pretende el film. Su intención es que te sientes en tu butaca con tu refresco y tus palomitas, y que te lo pases como los indios; nunca mejor dicho. Y eso, amigo, lo consigue.
Utiliza el recurso de reírse de todo aquello que, a priori, pueda resultar ridículo en la mitología del personaje y procura crear situaciones lo más espectaculares posibles para enganchar a la gran masa, que es al fin y al cabo quien hará posible que esto funcione. Cine comercial sí, pero con mayúsculas y el inconfundible sello de su productora: Walt Disney Pictures.
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